El demandante resultó herido en un accidente de automóvil cuando un autobús del estado pasó una luz roja y lo golpeó. De conformidad con una ley del Tribunal, el estado renunció a la inmunidad soberana por accidentes de vehículos causados por un empleado estatal negligente. Se le negó al demandante un juicio por jurado y el caso fue decidido por el tribunal. El demandante interpuso un recurso, argumentando que la ley le daba el derecho a un juicio por jurado.