El demandante presentó esta demanda solicitando daños por lesiones personales sufridas como resultado de un producto defectuoso. El demandante alegó que el producto del demandado, un sistema espinal utilizado en la cirugía espinal del demandante, se fracturó después de ser implantado, lo que obligó al demandante a someterse a una segunda cirugía. El demandante alegó que los productos del demandado eran defectuosos y carecían de advertencias adecuadas. En respuesta, el demandado presentó una moción de juicio sumario alegando que el demandante no había presentado un testigo para testimoniar sobre los presuntos defectos del producto. El demandado señaló además que al demandante se le impedía presentar su reclamo por falta de advertencia bajo la doctrina del intermediario instruido. El tribunal de primera instancia concedió la moción de juicio sumario del demandado. El demandante interpuso un recurso.
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