P sufrió complicaciones por una malla colocada por el demandado. El tribunal concluyó que la evidencia de artículos de revista sobre el procedimiento era inadmisible como oídas porque no había evidencia de que el demandado lo supiera o debiera saber. En segundo lugar, el tribunal sostuvo que la representación inocente no se extiende a los médicos que consultan a sus pacientes.